Escuchaba a la tarde a la filósofa argentina Susana Giménez dando cátedra sobre inseguridad, derechos humanos y moral.
Sentí mucha bronca por la hipocresía de esta analfabeta política que compraba automóviles importados simulando ser discapacitada, y decidí escribir algo en este espacio que muchas veces funciona como terapia catártica.
Es así que empecé por donde empiezo siempre: buscando imágenes en la web. En este caso entré a un conocido buscador y escribí "susana gimenez auto discapacitado".
He aquí lo que encontré:
Me cagaste, Susana. Andá a cagar, me voy a ver a Capusotto.
Ja, se hace la pelotuda pero es bien viva la hija de puta.
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